Si hay una imagen icónica en el yoga, esa es la de una mujer sentada con una pierna encima de otra y las palmas de las manos sobre las rodillas mientras permanece con los ojos cerrados en estado de meditación. Es la padmasana, o postura de loto, la pose que propicia la meditación plena. Y no es tan fácil de hacer como parece.
Si quieres iniciarte en el yoga, la padmasana es sin duda la postura de referencia y posiblemente sea la más popular del mundo. Mientras poses como la apanasana o phalakasana se orientan más a aspectos físicos, la postura del loto, como también se conoce a la padmasana, encuentra su lugar de acomodo en el campo de la meditación. Y otra cosa: no es tan sencilla de hacer como parece.
La flor de loto es un símbolo antiguo que ha sido representado en muchas religiones. Algunos de sus significados son el de iluminación, renovación, renacimiento, pureza, belleza o riqueza espiritual. En la iconografía hindú, se representa comúnmente junto a poderosas deidades. Estas deidades también se muestran habitualmente sentadas en la postura del loto. Algunos incluso llegan a calificar esta posición como « la destructora de enfermedades» por sus múltiples beneficios.
Cómo hacer bien padmasana
Si crees que la padmasana es simplemente una postura sentada con las piernas cruzadas, hay mucho que matizar. Porque en realidad requiere bastante fuerza, flexibilidad y paciencia. Y no: no se cruzan las piernas. Este es el error más común. Para empezar, siéntate en el suelo y coloca tu pie derecho sobre su muslo izquierdo. Luego dobla la pierna izquierda y agarra el pie izquierdo, colocándolo sobre el muslo derecho. No te preocupes si no eres lo suficientemente flexible como para colocarlo completamente sobre tu muslo. Simplemente ponlo lo más alto que puedas sin que sientas dolor.
Una vez que ambos pies están en el lugar adecuado, flexiónalos y tira de la parte interna de los muslos hacia el suelo. Endereza la columna vertebral y coloca l as manos sobre las rodillas con las palmas hacia arriba. Inhala y exhala lentamente cinco veces. Cada vez que exhales, debes sentir cómo las piernas y la pelvis tocan el suelo. Haz entre 6 y 12 respiraciones y luego repite con las piernas cambiadas.
Los beneficios de la pose de loto
La pose de loto se utiliza para ayudar para fomentar la respiración adecuada mientras te conectas con la tierra y creas una estabilidad física. Puede parecer una pose simple, pero los beneficios de la padmasana van más allá de la simple curación. Es extremadamente poderoso para conectar la mente, el cuerpo y el espíritu.
Al practicarla regularmente, puedes reducir en gran medida la fatiga general y despertar numerosos beneficios para la salud. Junto con una mayor flexibilidad, encontrarás alivio de la ansiedad, mayor conciencia, una buena postura, atenuarás las molestias menstruales y la ciática, reducirás el insomnio, mejorarás la digestión, fortalecerás las articulaciones, etc.
Tiene numerosos beneficios para la salud de la mente, el físico y la energía espiritual. Ayuda a aumentar la circulación en la parte inferior de la columna, energiza y tonifica los músculos y órganos abdominales mientras aumenta la flexibilidad y la fuerza en las caderas, los tobillos y las piernas.
