El retinol es el ingrediente estrella de la cosmética antiedad. Previene y trata todos los signos del envejecimiento de la piel. Pero sabes qué es en realidad. Te desvelamos todos sus secretos para rejuvenecer la piel.
Dermatólogos, farmacéuticos y expertos en el cuidado de la piel coinciden: el retinol puro es el activo de mayor eficacia para tratar las arrugas. Existen un gran número de estudios científicos que avalan todos sus beneficios. Eso sí, es importante usarlo correctamente, es decir, introducirlo en la rutina de forma progresiva (es lo que se conoce como retinización de la piel), ya que es un activo que puede irritar, y siempre combinarlo con protección solar alta.
¿QUÉ ES EL RETINOL PURO?
El retinol puro es una sustancia derivada de la vitamina A que actúa tanto en la epidermis como en la dermis. Sus secretos para rejuvenecer la piel los resume así la doctora Paloma Cornejo, experta en dermatología: «el retinol incrementa la producción de colágeno, mejorando la firmeza y elasticidad y minimiza las arrugas finas. También incrementa el recambio celular y regula el proceso de queratinización, mejorando la textura cutánea y previniendo los comedones que inician el proceso del acné. Además, reduce la hiperpigmentación, mejorando y homogeneizando el tono de la piel, utilizándose en sinergia con despigmentantes en melasma y lentigos».
En resumen, el retinol ataca todos los problemas habituales en la piel conforme pasan los años: las arrugas, la pérdida de firmeza por la degradación del colágeno, las manchas, el tono y la textura irregular e incluso mejora el acné, así como el tamaño de los poros.
CÓMO USARLO CORRECTAMENTE
Para disfrutar de todos los beneficios antiedad del retinol puro, es esencial empezar con concentraciones bajas, usándolo un par de veces a la semana, durante al menos una semana o diez días. Si nuestra piel no sufre ningún tipo de reacción, se puede empezar a usar en días alternos, un par de semanas. Y después, ya se podría usar a diario, o alternándolo, con otros productos, según necesidades de cada piel. Es importante evitarlo durante el embarazo y la lactancia, y aplicarlo siempre por la noche, sobre la piel limpia y seca, como primer paso, después de la limpieza. Por el día, siempre hay que usar protección solar, porque el retinol renueva la piel, lo que hace que sea más vulnerable a manchas y quemaduras. Lo ideal es preguntar antes de usar retinol a un experto, a un dermatólogo o farmacéutico, que te recomiende el mejor producto para empezar.