Conservarlos en buena forma es un desafío por muchas razones. Mencionamos qué debemos tener en cuenta para mantenerlos jóvenes y naturales.
Con el paso del tiempo los labios van perdiendo la consistencia joven y natural que los caracteriza. La sonrisa, los gestos de alegría o tristeza constantes, hacen que la piel presente signos de agotamiento y comiencen a parecer algunas arrugas en su entorno, flacidez en las comisuras y pérdida de volumen. Aunque existen varios tratamientos estéticos para mantenerlos intactos, mencionamos algunos consejos para tener en cuenta a la hora de cuidar el volumen de tus labios.
Para mantener los labios hidratados, sin arrugas y rellenos, existen varios tratamientos estéticos. En la actualidad es posible corregir los detalles que no te gustan de tu boca, con técnicas y materiales de rellenos que, de no ser bien aplicados, pueden ofrecer un resultado exagerado, algo que podemos evitar.
Si los labios presentan una piel reseca, cuarteada y agrietada, son signos de que la mucosa labial no está bien hidratada. Estos síntomas harán que pareciera que los labios están disminuyendo el volumen, por lo que tenemos que considerar varios aspectos para cuidarlos y mantenerlos en forma.
La piel que recubre los labios, al igual que los párpados y otras zonas sensibles, es un poco más fina que el resto del rostro, y requiere cuidados especiales tanto en la limpieza como en la exfoliación y la hidratación. Es importante no humedecer los labios con saliva, porque los reseca provocando grietas. En el caso de que tus labios presenten «pielcitas», no hay que arrancarlas ni morderlas, ya que podes herir la mucosa. Es muy importante protegerlos del sol, siempre usando un factor de protección 15. Y, por último, utilizar barras de labios más cremosas, que además de aportar color, hidraten tu piel.